domingo, 30 de abril de 2017

BEBIDA DE PASIÓN



La lucha de todo un pueblo se purifica
Cuando bebe la amarga dulzura de lágrimas fatigadas
De las transformaciones poderosas del trabajo
De las
Dulces
Vidas del
Obrero
Que rompe
Con las
Miserias,
Las injusticias,
Sometidos


A la tiranía de los medios
Burgueses de comunicación y des-
Información que tergiversan
La realidad, nuestro entorno, similar a la
Verdad hecha de mentiras y desilusiones
Como un martillo golpea con la fuerza
El trabajador con un extraño licor
La fuerza de trabajo, que derrumba un mundo
Destrozado por las bombas del águila
Rapiñara del norte, la selvática
Vida de tushijos

sábado, 31 de mayo de 2014

El paramilitar que tienes a tu lado


No habrá marcha de victoria
porque me falta un elemento fundamental
Tus besos que son mi munición
ya que tu indiferencia es la perdida de la batalla

No mires indiferente a este guerrillero suburbano
¿Acaso no sabes que tus ojos verde selva son el escondite de mi tropa?
Si no lo sabías es una profunda decepción
Porque para mi pueblo hambriento no habrá revolución

Mis camaradas amor e ilusión mueren poco a poco
Porque sin tu presencia en la selva es más fuerte el frío
Ni el comandante lo aguanta
Necesita un abraso tuyo que es la manta que le dará calor

El hombre que te acompaña hoy es un paramilitar que mató a toda mi tropa
Incluyendo toda esperanza de triunfo
Él evitó que tomemos tu amor
Evitó que celebremos el 26 de julio porque no tomamos el cuartel Moncada en tu corazón.

Héctor Marín

Hoy


Hoy… tenemos que despertarnos en forma diferente,
hoy… tenemos que sentir la brisa fresca del viento en nuestros rostros,
hoy… es un día para procurar ser diferentes,
hoy… es un día preciosa tanto como los otros días del año.

Hoy… tenemos que decirnos que nos queremos mucho,
hoy… tenemos que dar lo mejor de nosotros,
hoy… es un día para procurar ser diferentes,
hoy… es un día decisivo.

                       Hoy… tenemos que plantear lo que queremos o deseamos

Wilson Allende

Cómo


Cómo mirarte a la cara
Después de que me has amado
Con ese amor que es pecado
Que la moral ha borrado.

Cómo darte una palabra
Si mi boca se ha sellado
He probado la derrota

Y hoy me quedo desalmado.

Jorge A. Leguizamón

Alejandrinos

                               
               hexaédricos poemas pitagóricos,
               la belleza en las letras...
               las letras en las palabras,
               palabras diarreicas, sin importar
               el porqué... palabras son poesías.

                                                                                                                    
Juan Osmar Leguizamón Ávalos

Volver

He decidido partir a un lugar cercano como distante
Donde los colores no se parecen a mis bosques
Donde las carreteras entre gente tiesa corren...
Silban tonos raros, tan raros como sus trenes, caminos, ríos,
Tan ajenos a los nuestros, como los nuestros son para ellos
Cada paso es un descubrir indeleble, insospechado
Cada hombre un destino distinto, el mío es unir mis labios y
Espíritu de roble, a esa mujer...
América es mi tierra, vientos que nacen de los huesos
Del cielo, alfombra de ojos
Voy a amar a otras patrias, a besar sus sueños
Los de mi amada, la que la vida me dio
Para construir el mundo nuevo, la tierra es nuestra
Para heredar la fraternidad de los que rompen cadenas
Para verse en los espejos del presente y reflejar futuro
No me he de rendir, he de ser lo que decidimos ser
No un panfleto yerto en las sombras de un mundo ajeno,
Sino la viva voz del que ha despertado de su largo tormento
Las páginas se escriben y se arman de amor, dicen « verdad »
En los ojos de la mujer amada, en el pelo rojo del amanecer

Ernesto R. Centurión


martes, 24 de enero de 2012

Cuando las hijas del proletariado se vuelven mujer


¿Cómo fue que te hiciste mujer? Si hace poco tiempo jugábamos juntos.
¿Por qué tan rápido? Si se nota que en la inocencia de tu mirada todavía quieres ser niña.
¿Por qué quisiste florecer? Si sabes que las hijas de los obreros son como flores que no tardan en marchitarse.
¿Acaso no te gustaba jugar? ¿Acaso no fui un buen amigo?
¿Acaso las risas de nuestra infancia ocultaban tu tristeza?
¿Acaso querías huir de un mundo en donde las oportunidades solo pueden ser observadas de lejos?
¿Acaso buscabas en él la salida de este complejo laberinto?
¿Sientes que el vació que dejaron otros será llenado simplemente porque quemas la etapa que debería ser la más bella, para vivir otra que no conoces?
¿Sabes qué? no te culpo, y en el fondo me hubiera gustado tener más tiempo para que me elijas como el que opaca tus tristezas, tu salida del laberinto y el que llena el vacío de tu corazón.
                                                                                                               
Solo me queda vivir la última agonía de mi infancia invitándote a jugar por última vez para que seas por un momento niña antes de volverte mujer.

Héctor Marín